1. Somos personas no máquinas.
El entrevistador es una persona, no una máquina. Explícate con claridad y convicción, y detecta si logras atraer su atención, hacerte entender, etc. Según vaya mostrando interés podrás extenderte más o menos.
2. No te sientas en inferioridad
No te sientas en inferioridad. Estás intentando descubrir con otra persona si podéis llegar a un acuerdo, hallar un terreno común a vuestros intereses, es una negociación «gano-ganas», en la que los dos os podéis beneficiar.
3. Conductas que no debes hacer
No fumes ni masques chicle, ni te sientes «a la defensiva» de brazos cruzados. Muéstrate relajado pero no bajes la guardia ante muestras de confianza, puede ser una treta.
4. Atento a los gestos (comunicación no verbal)
No gesticules demasiado, ni grites, ni utilices muletillas. Piensa un segundo la respuesta antes de empezar a hablar.
5. Cuida tu imagen e higiene.
Mantén una buena imagen acorde con tu estilo pero siempre con higiene y bien arreglado.
6. Confianza
Mira a los ojos del entrevistador, aprieta la mano con firmeza cuando te la ofrezcan al empezar y al acabar. Estás seguro de ti mismo pero no vas a mostrarte vanidoso ni a criticar tus anteriores empleos o jefes.
7. Sé tu mismo
Sería muy costoso tener que mantener una falsa impresión del primer día durante toda la vida.
8. El CV
Haz referencia a tu CV: «Como pone en mi CV, trabajé…». Si han leído decenas de CV, habrán olvidado puntos importantes que tú deberás volver a destacar.
9. Pregunta tú también
No sólo contestes, pregunta lo que necesites saber (características del puesto, funciones, …). El entrevistador desconfiará de una persona que no tiene nada de iniciativa en una entrevista. Te medirán por tus respuestas pero también por tus preguntas.
10. El futuro (lo que puedes hacer)
Destaca tus rasgos que sean importantes para el puesto a cubrir, no apabulles con datos o historias que no tienen que ver. Más que centrarte en el pasado, después de destacar que posees la preparación o experiencia requeridas, habla del futuro y de lo que puedes hacer por la empresa.
11. Demuestra lo que ya has conseguido
Cuando hagas referencia a algún éxito conseguido, aporta pruebas, no sólo lo nombres.
12. Observa tus puntos débiles e intenta reforzarlos:
«Es cierto que hace tiempo que no trabajo, pero he dedicado este tiempo a formarme en los aspectos que creía más necesarios (si estas desempleado).
Mi edad puede parecer un inconveniente, pero puedo demostrar mis ganas de aprender y trabajar para aplicar los conocimientos de la carrera». (Si tu edad es muy alta)
Si tienes alguna otra duda respecto a cómo afrontar la búsqueda de empleo ponte en contacto con nuestra asesoría psicológica y allí te orientarán la forma más adecuada de hacerlo.